domingo, 21 de junio de 2020

Reseña "Teoría del Color"

Bueno, pues por fin me he podido poner a leer mi regalo de cumpleaños. Un libro que según vi anunciar supe que tenía que leer: "Teoría del color: aplicación práctica en fotografía" de Jesús M. García-Flores.

Para los impacientes, o los amantes de los spoilers, merece la pena. Y mucho. El contenido es de muchísima calidad, se aprende en cada capítulo alguna cosa interesante, se lee de forma sencilla y rápida... ¿Qué más se puede pedir?


Libro Teoría del Color - Jesús M. García Flores
Teoría del Color: portada


Para los menos impacientes... la reseña continúa un poquito más :)

El libro va progresivamente introduciendo todo lo relativo al color: desde cómo se percibe por parte de los ojos hasta cómo aplicarlo de la manera correcta en nuestras imágenes. Por el medio una detallada descripción de las armonías y especialmente de los círculos cromáticos junto con las reglas cromáticas para sacar el mayor partido a una escena. Todo ello con múltiples esquemas e imágenes del propio Jesús M. García sirviendo de ejemplos para cada uno de los apartados. Y sólo por poder ver estas imágenes en grande, con sus EXIF y sus coordenadas GPS merece la pena todo el libro.

Las explicaciones son minuciosas y claras cubriendo todos los aspectos y aclarando todas las dudas que se van planteando en el camino.

RGB, RYB, CMYK, HSL/HSB... múltiples siglas de conceptos que, al menos en mi caso, estaba acostumbrado a usar pero sin saber realmente cómo sacar el máximo partido de cada una de ellos

Muy interesantes también los capítulos dedicados a valorar los diferentes pesos visuales de cada color o acerca de psicología de los mismos.

En un libro tan completo no creo que sea correcto hablar de puntos negativos. Sinceramente creo que no los hay. Pero dado lo amigo que soy de meterme en charcos, sí quería indicar los puntos que, repito que sin poder decir que no me hayan gustado, a mí me han gustado menos que el resto

En primer lugar el libro está escrito en primera persona. Seguramente sea costumbre a la hora de corregir memorias de alumnos pero me sorprendió. En un libro de este estilo, que aspira merecidamente a ser referencia en el campo quizás esperaba que estuviese en tercera persona.

También por deformación profesional tiendo a fijarme en el tema de las referencias. Aquí he visto dos cosas. Por una parte, en alguna ocasión hay demasiado espacio entre la referencia que se hace a una figura y la propia figura. Por ejemplo, la figura 1.02 se referencia en la página 33 y sin embargo la figura no aparece hasta la página 37. Esto hace andar avanzando y retrasando hojas, lo que hace más incómoda la lectura. Por otra parte, el libro está trufado de múltiples referencias a tratados, libros, etc. Se indica por lo general el autor y el título, pero quizás le daría un plus adicional disponer de la referencia bibliográfica completa, bien al final del capítulo bien al final del libro.

Uno de los capítulos que esperaba con mayor interés, sobre todo después de escuchar al autor en varios podcasts, es el relativo al momento de la captura. Uno de los puntos a los que se puede sacar gran partido y al que apenas se suele prestar atención es el del ajuste de precisión del balance de blancos. Igual se escapa del nivel pretendido para el libro pero a este aspecto se le dedica apenas una página. Yo al menos me quedé con ganas de algo más.  

Por último, algo parecido me ha pasado con los los capítulos destinados a edición. Bueno, aunque aquí he de reconocer que añada lo que añada me parecería siempre poco 😉. Especialmente interesante me ha parecido el uso del modo Lab para la potenciación de colores, pero pensé que el libro incluiría algún ejemplo concreto de aplicación de dominantes o de equilibrio de colores mediante máscaras de luminosidad que tan de moda están en el mundillo fotográfico.

Y hasta aquí lo que dio de sí el libro. Mucho y bueno, con lo cual sólo me queda recomendarlo a todo aquel interesado, no sólo en la fotografía, sino en el manejo del color en general. 

Ahora sólo queda que el propio Jesús M. García me perdone el sacrilegio de ponerle la más mínima pega a tan excelente obra! Pero es que no puedo evitar pisar charcos 😊

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